Activación rápida de los productos de apoyo en iOS

En iOS, el sistema operativo de Apple para sus dispositivos móviles, se incluyen varios productos de apoyo para ayudar a diversos perfiles con discapacidad a la hora de acceder a los contenidos y funcionalidades del dispositivo.

En otras plataformas de dispositivos móviles la activación o desactivación del producto de apoyo suele consistir en la ejecución de un programa instalado en el propio dispositivo, este método suele resultar inaccesible para los usuarios ya que se enfrenta a un problema muy simple: ¿cómo va a encontrar el programa de activación del producto de apoyo un usuario con discapacidad que necesite dicho producto de apoyo para manejar el dispositivo? La solución en estos casos pasa por dejar activado siempre el producto de apoyo. Esto hace que el teléfono resulte inaccesible para las personas que no sepan manejar ese producto de apoyo o no tengan ese perfil de discapacidad. Esto se debe a que, normalmente, el producto de apoyo modifica el comportamiento de teclado y gestos en pantallas táctiles para incorporar las funciones de navegación y exploración del producto de apoyo para que el usuario con discapacidad pueda utilizar el dispositivo de forma cómoda para su perfil de discapacidad. El producto de apoyo se convierte en inaccesible para las personas sin discapacidad u otros perfiles de discapacidad impidiendo que se pueda compartir el dispositivo entre otras personas.

Apple ha pensado en este problema y ha incluido un método de activación/desactivación rápida de los productos de apoyo incluidos en el sistema. De esta forma una familia puede utilizar un iPad u otro dispositivo sin preocuparse de que el miembro de la familia que tiene discapacidad se quede sin su producto de apoyo.

Triple pulsación del botón inicio

Los dispositivos móviles táctiles de Apple incluyen, bajo la pantalla normalmente, un pequeño botón circular denominado Home o inicio. Este botón se utiliza para salir de las aplicaciones, acceder a las aplicaciones abiertas en segundo plano y otras funciones. A este botón podemos añadirle una nueva funcionalidad asociada al gesto de pulsarlo tres veces. Esta nueva funcionalidad nos permitirá activar o desactivar un producto de apoyo de iOS de forma rápida e incluso acceder a un menú de selección para activar uno de los productos de apoyo del sistema.

Para activar este gesto de tres pulsaciones en el botón de inicio debemos ir a Ajustes / general / accesibilidad. Allí encontraremos una opción llamada click triple en inicio. Entraremos en esta opción y nos aparecerá un menú de selección para activar/desactivar rápidamente el producto de apoyo deseado. Por ejemplo, los usuarios ciegos deberían seleccionar VoiceOver, de esta forma podrán activar/desactivar rápidamente el lector de pantallas.

Entre las opciones disponibles para el triple inicio encontramos una denominada preguntar, esta opción lo que hace es que cuando pulsemos el botón inicio tres veces salga un cuadro de diálogo que nos permite activar/desactivar rápidamente uno de los productos de apoyo. Esta opción es ideal para los desarrolladores de software de iOS que quieran verificar el nivel de accesibilidad de sus productos utilizando las herramientas de accesibilidad proporcionadas por Apple

Touch type, teclado virtual accesible para ciegos en Android

Una de las limitaciones más importantes que existen en Android, en cuanto a accesibilidad del sistema para usuarios ciegos, es la imposibilidad de utilizar el teclado virtual en pantalla debido a las limitaciones de exploración de los elementos en pantalla a través de la pantalla táctil. Con Talkback o spiel, los dos lectores de pantallas compatibles, actualmente, con Android no se puede explorar la pantalla tocando con los dedos ya que el usuario, cuando coloca un dedo en la pantalla, activa el elemento y después de la activación la síntesis de voz verbaliza qué se ha activado. Esto provoca que el intentar escribir utilizando el teclado en pantalla sea una operación bastante compleja.

La solución ofrecida por el equipo de desarrollo de accesibilidad de Google y el proyecto Eye-free es un tanto ridícula. Oficialmente dicen que se utilice un teléfono con teclado físico o se conecte un teclado externo vía Bluetooth para poder escribir cualquier cosa. Esta solución va en contra del mercado, en el cual cada vez aparecen más teléfonos con sólo pantalla y sin botones. El conectar un teclado externo Bluetooth implica introducir una clave numérica en el terminal para emparejar los dispositivos, ¿pero, si no podemos teclear cómo introduciremos la clave de emparejamiento?

La comunidad de usuarios y desarrolladores de Android no tiene porqué conformarse con las decisiones de Google para Android. Un ejemplo de esto es el proyecto Touch type, desarrollado por un grupo de desarrollo independiente de Google.

Teclado virtual a semejanza de iPhone

Touch type es un programa para Android que permite sustituir el teclado habitual en Android por otro teclado con la particularidad de ser compatible con la síntesis de voz y accesible en la gestión de gestos en la pantalla.

El método de escritura es muy similar a uno de los métodos que ya se utilizan en el iPhone o en el iPad. Se debe arrastrar el dedo por la parte baja de la pantalla, cada vez que el dedo se coloque sobre una letra, esta será verbalizada. Si dejamos de tocar la pantalla, la letra será introducida en el campo de texto.

Para saber más sobre Touch type puedes visitar la página oficial del proyecto Touch type para Android

Esperanzas en un Android accesible para ciegos

Actualmente el proyecto Touch type está en versión beta, por lo que su funcionamiento no es del todo fiable, pero los resultados obtenidos en esta versión inicial hacen que se tengan esperanzas en tener un Android accesible para ciegos a medio plazo.

Lo que queda por hacer en accesibilidad de Android

Tras obtener una solución para el teclado virtual en Android, sólo falta que los lectores de pantallas se puedan utilizar a través de gestos en la pantalla en lugar de utilizar trackballs, cursores o touchpads, así como algunos botones de navegación. Además se debe conseguir una mayor integración de las librerías de accesibilidad para las aplicaciones disponibles en el Market de Android. Con esto podríamos decir que Android será un duro competidor de iOs en cuanto a la accesibilidad para usuarios ciegos.

En cuanto a otros perfiles de discapacidad decir que Google sigue distraída sin prestar oídos a las necesidades de otros perfiles de discapacidad.

Convivencia de MacOS X y Windows dentro del hardware de Apple

Muchos usuarios que quieren dar el salto al sistema operativo de Apple tienen miedo del periodo de adaptación. Aunque MacOS X sea muy intuitivo es cierto que requiere de un periodo de adaptación, sobre todo si el usuario tiene que acostumbrarse a un nuevo producto de apoyo. Una de las posibles soluciones, para hacer que la experiencia del switcher (denominación que se da a la persona que cambia a otro sistema operativo) no sea tan traumática es utilizar 2 sistemas operativos en la misma máquina.

Boot camp

MacOS X, en sus últimas versiones, incluye una utilidad para estos usuarios que vienen de Windows pero quieren saltar a MacOS X manteniendo el uso de Windows. Esta utilidad se llama Boot camp y permite, desde MacOS X, crear una partición en el disco duro y comenzar el proceso de instalación de windows. Todo el proceso de creación y gestión de Boot camp es accesible pero cuando comience el proceso de instalación de Windows, al reiniciar la máquina, sólo dispondremos de la accesibilidad que proporcione Windows en su proceso de instalación, lo que es muy poca o nula accesibilidad.

Al utilizar Boot camp, en Windows, deberemos instalar una serie de drivers y aplicaciones que nos permitirá aprovechar más el hardware de Apple sobre Windows. Además, nos permitirá seleccionar con qué partición arrancaremos la próxima vez que encendamos el equipo. Con esta característica un usuario ciego puede decidir si arrancar Windows o MacOS X sin necesidad de acceder a Grub, Lilo o cualquier otro gestor de arranque.

Virtualización

Con la solución de Boot camp deberemos reiniciar el equipo cada vez que queramos cambiar de sistema operativo. Esta solución puede ser apropiada para aquellos usuarios que pasen largas sesiones en un sólo sistema operativo. Para los usuarios que trabajen en MacOS X y quieran, muy puntualmente, acceder a Windows para utilizar una aplicación concreta la mejor solución pasa por virtualizar.

La virtualización de un sistema operativo consiste en utilizar una aplicación de virtualización (cliente) que permita ejecutar otro sistema operativo como si fuese un programa.

Para MacOS X hay varias soluciones de virtualización: VMWare, Parallels, VirtualBox, etc. Cada una tiene sus ventajas y defectos.

La principal diferencia entre ejecutar un sistema operativo de forma nativa, como se haría con Boot camp en el caso de Windows, es que todos los recursos de hardware están disponibles para el sistema operativo. En el caso de una ejecución virtualizada, si ejecutasemos un Windows virtualizado, sólo podríamos acceder a los recursos que el cliente de virtualización nos permita. Esto se debe, principalmente, a que los recursos de la máquina deben repartirse entre los dos sistemas operativos que se están ejecutando: el sistema operativo base o anfitrión, que ejecuta el cliente de virtualización, y el sistema operativo virtualizado.

Algunas ventajas de la virtualización es la posibilidad de almacenar instalaciones completas de un sistema operativo en discos externos. De esta forma, si nuestro Windows comienza a ir más lento o se detectan problemas de ejecución que nos hacen pensar en que tenemos que reinstalar, podemos ir a la carpeta donde nuestro cliente de virtualización guarda sus máquinas virtuales (que es como se conoce a una instalación de un sistema operativo virtualizado) y sustituir el Windows corrupto por nuestra copia de seguridad. Todo el proceso de reinstalación de Windows, más de 45 minutos, se reducen a un par de minutos. Incluso algunos clientes de virtualización permiten copiar o descargar instalaciones ya creadas.

Problemas de accesibilidad y virtualización

La ejecución virtualizada de un sistema operativo puede crear conflictos con algunos productos de apoyo. Por ejemplo, se conoce el problema que existe con VMWare, uno de los clientes de virtualización más utilizados, y la tecla de bloqueo de mayusculas, utilizada por varios lectores de pantalla como tecla de función. Además, el teclado de MacOS X no posee la tecla Insert, tecla también utilizada por varios productos de apoyo. La solución pasa por remapear la función de una de las teclas duplicadas del teclado (comando, mayúsculas, etc) y asignarle a dicha tecla la función de tecla Insert.

Un problema que afecta tanto a sistemas operativos virtualizados como nativos es la poca tolerancia del driver de vídeo de Jaws a drivers gráficos un tanto especiales. En el caso de una instalación nativa, una vez hayamos instalado los drivers de Boot camp, no encontraremos problemas. En el caso de una instalación de windows virtualizada, deberemos evitar el modificar el tamaño de la ventana del cliente de virtualización. Se recomienda utilizar Windows virtualizado a pantalla completa. Además, deberemos instalar los drivers para Windows del software de virtualización que estemos utilizando.

Conclusiones

Con estas posibilidades de ejecutar Windows y MacOS X el camino del switcher se hace más cómodo. Sólo debemos decidir si queremos 2 instalaciones nativas, para largos periodos de uso de una de ellas; o instalación nativa de MacOS X y virtualizada de Windows, por lo que Windows irá un poco más lento pero podremos saltar de un sistema operativo a otro de forma muy rápida.

Android 2.3, una decepcionante novedad en accesibilidad

A principios de este mes de Diciembre Google publicó la última versión de su sistema operativo para dispositivos móviles, más conocido como Android.

Esta nueva versión, la 2.3, cuyo nombre en clave es galleta de jengibre, prometía incluir sustanciosas mejoras en accesibilidad para aquellos usuarios con discapacidad visual.

Tras la publicación de la noticia por parte de Google, muchos de los que estamos interesados en Android y su accesibilidad consultamos la lista de novedades y mejoras de esta nueva versión. el resultado fue del todo decepcionante. Ni una sola mención a cualquier mejora o característica de accesibilidad.

En la lista de correo del grupo de usuarios del proyecto Eyes-free, donde se localiza TalkBack el lector de pantallas oficial para Android, muchos usuarios publicaron mensajes transmitiendo sus quejas y decepción ante esta aparente ignorancia de Google por las necesidades de los usuarios de Android con discapacidad visual. Hasta la fecha ningún miembro del equipo de desarrollo de Eyes-free ha dado una respuesta a las decenas de preguntas hechas por los usuarios de Talkback en la lista.

Android puede ser una buena alternativa ante el inminente monopolio que se puede crear en un futuro temprano sobre plataformas accesibles para dispositivos móviles. Symbian está muriendo lentamente, Apple, con iOS, parece ganar cada día más terreno entre los usuarios con discapacidad, alternativas como Samsung Bada o Meego siguen sin una base de accesibilidad y, el gran contrincante de Apple en sistemas operativos para dispositivos móviles, nos referimos a Google, parece que no entiende que las leyes, cada vez más, obligarán a la adquisición de dispositivos accesibles por parte de las administraciones de países y grandes corporaciones.

Un servidor no entiende, actualmente, esta posición de Google de ignorar la necesidad de una solución accesible para Android. No se sabe, a ciencia cierta, si es incapacidad del proyecto Eyes-free por aportar una solución concreta y eficiente de accesibilidad para los usuarios con discapacidad visual. El equipo de desarrolladores ha hecho un buen trabajo con Talkback pero no es un producto terminado. No permite utilizar cualquier dispositivo con Android por parte de una persona ciega, no es compatible con las aplicaciones primarias de Android, como pueden ser el navegador Web o el cliente de correo electrónico. Hay programas alternativos en el Market de Android, la tienda on-line de aplicaciones para Android, pero esto imposibilita el hecho de identificar un teléfono con Android como un dispositivo accesible desde la caja.

Parece que el culpable de este desinterés por la accesibilidad se origina en Google al ver sus más recientes lanzamientos.

Google books, para iOS, es una aplicación para iPhone e iPad que permite acceder, comprar y leer libros en la tienda de libros de Google. La aplicación resulta accesible a la hora de manipular los libros, el acceso a la tienda y falla rotundamente en accesibilidad en su principal función: no permite leer los libros con lectores de pantalla. Un usuario ciego de iPhone o iPad podrá comprar libros electrónicos, ordenarlos en su librería, borrarlos o consultar el catálogo de obras disponibles pero no podrá leer ningún libro que haya adquirido.

Google Chrome OS, el sistema operativo de Google para equipos de sobremesa, ha aparecido sin ninguna característica de accesibilidad. Por no tener, no tiene ni teclas pegajosas, campana de sistema o un tema de alto contraste por defecto.

Esperemos que Google rectifique en su postura y comprenda que la accesibilidad y el diseño para todos son sellos de calidad en los proyectos de hardware y software.