En MacOS los usuarios de VoiceOver, el lector de pantallas de Apple, suelen utilizar el sistema utilizando el cursor de VoiceOver sin conocer que el sistema proporciona la posibilidad de utilizar otros dos cursores.
En MacOS existen estos cursores o focos de uso: el cursor del ratón, el cursor del teclado, el cursor de foco del tabulador y el cursor de VoiceOver.
Por defecto VoiceOver hace que su cursor modifique a los otros 3 haciendo que el ratón, el teclado y el foco de tabulación sigan, siempre que se pueda, la posición del cursor de VoiceOver para que cuando pulsemos VO+espacio tanto el click de ratón como la pulsación de la tecla enter se realice donde VoiceOver está prestando atención.
Separando cursores de forma puntual
Podemos hacer que el cursor de VoiceOver deje libres a los otros tres cursores. Para ello debemos pulsar la combinación de teclas VO+Mayúsculas+F3. Con esta combinación de teclas podemos activar o desactivar el control de cursor de VoiceOver. Cuando se desactiva este control, si movemos el cursor de VoiceOver pulsando Vo+Flecha izquierda o VO+Flecha derecha tanto el cursor del ratón como el cursor del teclado permanecerán en su posición.
¿Para qué separar los cursores?
Además de evitar problemas con elementos del menú qué reaccionan cuando el cursor del ratón se coloca sobre ellos, podemos realizar lecturas rápidas de otras zonas de la pantalla sin necesidad de movernos de un sitio a otro con el cursor de VoiceOver O evitar que aplicaciones web como Slack, Whatsapp o Trello realicen aperturas o selecciones de elementos al intentar explorar la interfaz usando el cursor de VoiceOver debido a que la aplicación reacciona ante el movimiento del cursor del ratón o el teclado.
Algunos ejemplos
Con los cursores separados podemos realizar tareas como las de dejar el cursor del teclado en un sitio mientras movemos el cursor de VoiceOver a otra posición del documento para consultar algún dato previo. También podemos colocar el puntero del ratón sobre un elemento para consultar el estado de un control.
Para hacer estas tareas primero nos movemos, por ejemplo, en nuestro documento utilizando las teclas de cursor mientras tenemos todos los cursores unidos al de VoiceOver. Nos aseguramos que el cursor de VoiceOver está dentro del contenedor de texto en el que se encuentra el cursor del teclado. Para ello interactuamos con el contenedor de texto pulsando VO+Mayúsculas+Flecha abajo hasta que no podamos profundizar más; una vez estemos dentro del contenedor desactivamos el control del cursor pulsando VO+Mayúsculas+F3 y ahora si movemos el cursor de VoiceOver con VO+Flecha arriba leeremos un texto y si usamos las flechas de cursor leeremos el texto que está en el cursor del teclado. Con esto podemos explorar el texto con dos cursores distintos.
Ahora, mientras seguimos con los cursores separados, movemos el cursor de VoiceOver hasta la barra de estado de nuestro editor de textos y movemos el cursor del ratón a la posición del cursor de VoiceOver pulsando VO+Comando+F5. Ahora volvemos el cursor de VoiceOver a la posición del cursor del teclado para seguir editando nuestro documento. Pero esto lo podemos hacer más rápido haciendo que el cursor de VoiceOver salte a la posición del cursor del teclado pulsando VO+Mayúsculas+F4 y así podemos seguir escribiendo y cuando queramos ver la barra de estado del documento con el número de palabras escritas pulsamos VO+F5 para que nos lea qué hay bajo el puntero del ratón.
Más control requiere un poco de precaución
Con este tipo de navegación puede parecer que al usuario se le exija más concentración y memorizar el estado de control de los cursores por parte de VoiceOver. Esto no es del todo cierto, podemos incluir el hábito de pulsar VO+Mayúsculas+F3 para comprobar el estado de activación o desactivación del control de cursores y así conocer qué puede estar pasando cuando intentamos llegar a una opción que, misteriosamente, no podemos llegar porque el menú de la aplicación se cierra o el teclado no funciona como esperábamos.